Huesca, España.- Una joven de 20 años de edad, tuvo que ser inducida al coma, tras rechazar una transfusión de sangre por motivos religiosos, pues es testigo de Jehová.
La joven se encuentra internada en el hospital San Jorge de Huesca en España y a pesar de que su familia no comparte la misma religión con la joven, no pueden hacer nada pues dejó un testamento en donde señalaba su decisión, si es que algo salía mal con la operación por peritonitis a la que tenía que ser sometida.
El Tribunal de España dio a conocer que se debe respetar la Ley Autónoma del Paciente.
Los doctores se encuentran en este momento en una cruzada, ya que al seguir el juramento, están obligados a hacer todo lo posible por salvarla, pero no pueden efectuar ninguna acción si el paciente no lo desea.
Con información de La Neta Noticias