Zitácuaro, Mich.- Informa Oriente - El reportero Armando Linares, que en días pasados fue víctima de agresiones por parte de agentes de la Fiscalía Regional de Zitácuaro, recibió amenazas contra él y su familia, reveló en entrevista.
El pasado domingo 12 de julio, el reportero acudió a la comunidad San Felipe Los Alzati, para cubrir el asesinato de una mujer.
Molestos por la presencia del reportero que transmitía en vivo a sus seguidores el hecho de violencia, un agente de la Fiscalía Regional que se identificó como Eduardo Hernández -aunque se duda que ese sea su verdadero nombre- le pidió a Armando Linares que detuviera su labor, pero éste se negó al no estar entorpeciendo la labor de los agentes.
Fue así que el uniformado fue en búsqueda de ayuda de su jefe, que se identificó como Segundo Comandante de ministeriales. “Te vamos a llevar a entrevistar” dijo el superior, mientras que el otro ministerial identificado como Eduardo le dio un manotazo a su celular, con el que Armando Linares documentó todo el suceso hasta la agresión.
“Aguante y tenga huevos, cabrón”, le dijo el mando de ministeriales, mientras que el de nombre Eduardo le dijo al reportero que la próxima ocasión la información de un hecho de violencia “me la pides a mí, hijo de tu puta madre”, hechos que quedaron documentados en el video que quedó en la red.
Lo que sucedió a continuación no se vio en el video pues el celular de Armando Linares fue roto, pero en entrevista para un medio local relató que estuvo retenido por al menos media hora, diciéndole el jefe de los ministeriales que si no lo golpeaba, era porque había mucha gente viendo.
“No sabes quién soy yo, te voy a dar en la madre, te voy a dar unos putazos”, le dijo el comandante de ministeriales al reportero, relató.
“Me voy a ir sobre tu familia, cabrón, me la vas a pagar”, amenazó el comandante de la Fiscalía Regional.
Finalmente el reportero logró comunicarse con la directora de su medio de comunicación, momento en que sus agresores le dijeron que no estaba detenido. “Entonces déjame ir -le dijo Armando a su agresor, “no estaba detenido pero no me dejaban ir, entonces estaba retenido”, concluyó.
Una vez libre dio aviso a su familia de la amenaza en su contra, por si ocurría alguna cosa.
El reportero dijo que buscará proceder legalmente contra sus agresores, pero no en la Fiscalía de General del estado, sino en alguna instancia dedicada a la protección de los periodistas.